Este espacio es para quienes busquen ANIMENTACIÓN con la que alimentar el alma a través del cuerpo. Un lugar donde compartir experiencias y reflexiones sobre la GASTROFELICIDAD, o lo que es lo mismo, sobre las estrechas y nutritivas relaciones entre la gastronomía y el "bien-ser". El sitio en el que poner en común recetas de cocina socioafectiva como recurso metodológico para la EDUCACIÓN EMOCIONAL. Bienvenido y bienvenida a este blog gastronómico para APRENDER A SER FELIZ
Me parece genial que en navidad se hagan regalos que permitan compartir momentos en familia. Y este es un buen ejemplo de ello. Se puede cocinar juntos de manera emocional y afectiva. Me gusta
Estoy convencida de que cocinar para los demás es una forma muy sutil de transmitirles afecto y valores, mi madre lo hacía y tal vez por eso su potaje de berros era para mi el mejor del mundo... con el me transmitió confianza, respeto,ternura. Me gusta mucho la idea de trasladar a la escuela un modo tan natural de ayudar a crecer a los niños y niñas en valores y habilidades socioafectivas.
El libro de Gastrofelicidad hace que empieces a mirar la acción del cocinar con otros ojos, con una perspectiva diferente a la que estamos acostumbrados o la que hemos olvidado. Te invita a prestar atención a los pequeños detalles que solemos pasar por alto por estar inmersos en la rutina que nos envuelve. Dejo una pista...las emociones están en todas las comidas que elaboras.
En estas épocas navideñas, donde muchas personas buscan desesperadamente algo que regalar es posible estresarse y acabar comprando cualquier cosa para salir del paso. Y es que hacer un regalo es muy fácil. Sin embargo, hacer un BUEN regalo es una acción realmente difícil que conlleva pensárselo, al menos, dos veces. Gracias a libros como este podemos regalarnos y/o regalar algo exquisito del que disfrutar a diario.
Sumergirse en el mundo de la cocina socioafectiva es una experiencia que debería ser un derecho constituido como tal.
Práctico, útil y sabroso en todos sus sentidos. ¡Felicidades!
Solemos comer mirando el reloj, ...viendo el telediario plagado de noticias tristes y duras ( guerras, violencia machista, atentados, etc). También es frecuente que se den discusiones acolaradas las tengamos durante la comida o incluso no les ha pasado de estar comiendo en buena compañía en un restaurante algo rico y la conversación gira sobre otras comidas y otros restaurantes visitados más ricos que este.... Recientemente he leído que "Para sentir placer al comer hay que poner atención en lo que se come". Se han fijado que cuando queremos probar algo nuevo solemos cerrar los ojos? es decir, queremos no distraernos con nada de fuera, ...por eso me gusta esa idea de que " cuando como, solo como".
Esta forma de cocinar que se presenta en este libro, invita entre otros aspectos a esto, a disfrutar de la comida desde el momento de la preparación, experimentando a través de analogías y metáforas otra forma de cocinar, hasta cuando nos sentamos a la mesa de manera consciente y tranquila a SABOREAR, OLER, MIRAR, COMPARTIR.... de manera amorosa los alimentos, sean los que sean, desde lo más sencillo a lo más elaborado. Por último, a mi me gusta incluir como una parte más de esta atención consciente antes de comenzar a comer el tener unos segundos para agradecer a las personas y a la sabia naturaleza que de un modo u otro nos regalan los productos necesarios para elaborar recetas nutritivas para alimentar y compartir con mi familia.... Así pues ¡¡¡provecho!!!!
Me parece genial que en navidad se hagan regalos que permitan compartir momentos en familia. Y este es un buen ejemplo de ello. Se puede cocinar juntos de manera emocional y afectiva.
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Estoy convencida de que cocinar para los demás es una forma muy sutil de transmitirles afecto y valores, mi madre lo hacía y tal vez por eso su potaje de berros era para mi el mejor del mundo... con el me transmitió confianza, respeto,ternura. Me gusta mucho la idea de trasladar a la escuela un modo tan natural de ayudar a crecer a los niños y niñas en valores y habilidades socioafectivas.
ResponderEliminarEl libro de Gastrofelicidad hace que empieces a mirar la acción del cocinar con otros ojos, con una perspectiva diferente a la que estamos acostumbrados o la que hemos olvidado. Te invita a prestar atención a los pequeños detalles que solemos pasar por alto por estar inmersos en la rutina que nos envuelve. Dejo una pista...las emociones están en todas las comidas que elaboras.
ResponderEliminarEn estas épocas navideñas, donde muchas personas buscan desesperadamente algo que regalar es posible estresarse y acabar comprando cualquier cosa para salir del paso. Y es que hacer un regalo es muy fácil. Sin embargo, hacer un BUEN regalo es una acción realmente difícil que conlleva pensárselo, al menos, dos veces. Gracias a libros como este podemos regalarnos y/o regalar algo exquisito del que disfrutar a diario.
ResponderEliminarSumergirse en el mundo de la cocina socioafectiva es una experiencia que debería ser un derecho constituido como tal.
Práctico, útil y sabroso en todos sus sentidos. ¡Felicidades!
Solemos comer mirando el reloj, ...viendo el telediario plagado de noticias tristes y duras ( guerras, violencia machista, atentados, etc). También es frecuente que se den discusiones acolaradas las tengamos durante la comida o incluso no les ha pasado de estar comiendo en buena compañía en un restaurante algo rico y la conversación gira sobre otras comidas y otros restaurantes visitados más ricos que este.... Recientemente he leído que "Para sentir placer al comer hay que poner atención en lo que se come". Se han fijado que cuando queremos probar algo nuevo solemos cerrar los ojos? es decir, queremos no distraernos con nada de fuera, ...por eso me gusta esa idea de que " cuando como, solo como".
ResponderEliminarEsta forma de cocinar que se presenta en este libro, invita entre otros aspectos a esto, a disfrutar de la comida desde el momento de la preparación, experimentando a través de analogías y metáforas otra forma de cocinar, hasta cuando nos sentamos a la mesa de manera consciente y tranquila a SABOREAR, OLER, MIRAR, COMPARTIR.... de manera amorosa los alimentos, sean los que sean, desde lo más sencillo a lo más elaborado. Por último, a mi me gusta incluir como una parte más de esta atención consciente antes de comenzar a comer el tener unos segundos para agradecer a las personas y a la sabia naturaleza que de un modo u otro nos regalan los productos necesarios para elaborar recetas nutritivas para alimentar y compartir con mi familia.... Así pues ¡¡¡provecho!!!!